El retraso en la recuperación de la lesión le provocó una miositis osificante.

Hace unos meses recibimos en nuestro centro de entrenamiento y recuperación a Borja De Francisco, jugador de Linces (equipo de fútbol americano de Sevilla). Borja llegó por un dolor en el muslo izquierdo tras una sucesión de acontecimientos que explicaremos a continuación.

Primero recibió un fuerte golpe en uno de los entrenamientos en su muslo izquierdo en la parte frontal-lateral. Después de observar que no podía entrenar bien por el dolor, acudió a un compañero fisioterapeuta que realizó una descarga de la zona y le recomendó que comenzara a entrenar poco a poco. A pesar de que el dolor aun persistía, comenzó a entrenar. En otro de los lances del entrenamiento, notó cómo la musculatura que tenía afectada no aguantaba y le daba un “tirón”.

Tras ello se puso en contacto con el Área de Fisioterapia de SportPlus Center, y concertó una cita de valoración para observar cuál era la lesión exacta que había sufrido Borja.

Durante la sesión de valoración n SportPlus Center, para el asombro del jugador, observamos a través del estudio ecográfico que el paciente sufría una discontinuidad de fibras de 11 centímetros de su músculo Crural (foto 1). Músculo perteneciente al cuádriceps, de la pierna izquierda.

Además, debido al retraso en acudir a nuestro centro, la lesión del jugador había mal-evolucionado a lo que se conoce en Medicina como Miositis Osificante (foto 4). Esta lesión es una proliferación de hueso en la zona de la rotura por una diferenciación aberrante de las células que se encuentran en el foco de la lesión. Esto es debido a su cercanía al hueso (el Fémur en este caso) generando zonas que podrían ocasionar al jugador una evolución de la lesión muy grave. Podría incluso ocasionar hasta limitación de la movilidad de la rodilla y tener que acudir a cirugía si esta problemática siguiera avanzando.

Explicamos la situación al jugador y le aconsejamos el tratamiento de elección tanto de la rotura muscular como de la miositis osificante secundaria.

De esta manera el jugador aceptó las condiciones del tratamiento y nuestro fisioterapeuta comenzó a aplicarlo.

El tratamiento de elección consistió en la aplicación de la Técnica EPI® (de la que somos especialistas y tenemos la máxima formación internacional), de forma que aplicaríamos una aguja a los focos de lesión. Con ello, por un lado, eliminamos el tejido fibrótico que estaba formándose en la rotura y que debíamos evitar para poder regenerar el músculo de una manera óptima.

Por otro lado, aplicamos la técnica sobre la osficicación (formación de hueso) formada en el propio músculo proveniente del hueso, que pudimos ir eliminando a través de la EPI®. Todo ello no podría haberse llevado a cabo sin una imagen de valoración ecográfica constante mientras aplicábamos la técnica EPI. Gracias a ello, pudimos observar a tiempo real que ocurría en el músculo mientras lo tratábamos y dónde teníamos que aplicarlo de manera exacta (fotos 2 y 5).

Todo el proceso duró varios meses de tratamiento intenso y guiado. Durante este tiempo, en nuestro centro de fisioterapia en Sevilla, además de realizarle la técnica EPI®, se aplicaron vendajes fasciales y compresivos, se realizaron estiramientos, y se le explicaron qué tipo de ejercicios terapéuticos debía llevar a cabo. El resultado obtenido fue la curación completa de la musculatura tanto funcionalmente como estructuralmente (fotos 3 y 6), ya que el jugador tras la última valoración ecográfica presentaba un patrón muscular idóneo y ya había comenzado a entrenar con el equipo en LINCES (LNFA).

Le deseamos la mayor de las suertes en su deporte y esperamos que pueda disfrutar mucho de él.

Testimonio de Borja, recuperado de una rotura muscular mal-evolucionada en miositis osificante.

Cuéntanos como comenzó tu lesión

Durante el verano pasado estuve entrenando con un nuevo equipo de fútbol americano El Puerto Seagulls. Es un deporte de contacto y aunque estuvimos jugando sin protecciones (casco, armadura…) en uno de estos entrenamientos, a finales de agosto, recibí un golpe en la pierna izquierda, en el cuádriceps. No pensé que fuese importante y aunque noté alguna molestia, comencé la pretemporada con Linces, hasta el mes de octubre cuando el dolor me hizo imposible continuar haciendo deporte.

¿Realizas algún deporte?

Si, práctico a nivel amateur fútbol americano (Sevilla Linces) y fútbol sala (Real Tenis Betis).

¿Cómo contactaste con nosotros?

Gracias al entrenador de Sevilla Linces, al continuar con las molestias me recomendó acudir al fisioterapeuta de SportPlus Center, Alejandro Barbosa.

¿Te trataron antes de venir a SportPlus Center?

Si, gracias a un amigo, contacté con un fisioterapeuta que trabaja en otra empresa y me trató en su casa. Me realizó un masaje en la zona y me comentó que pensaba que era una sobrecarga muscular. Tras dos sesiones y aumentando el dolor decidí acudir a otro fisioterapeuta para tener una segunda opinión.

¿Qué tal fue la valoración inicial de tu lesión en nuestro centro de fisioterapia en Sevilla?

En la primera sesión tras una ecografía me comentaron que tenía una lesión muscular bastante importante y se me aconsejó parar inmediatamente cualquier ejercicio de impacto. Como tratamiento se me recomendó la EPI, accedí a realizar este tratamiento. Al comenzar las sesiones tenía una lesión muscular de más de 11cm de largo y 5 cm de ancho, con principio de calcificación (miositis osificante).

¿Estás satisfecho con el tratamiento realizado?

A pesar de que el tratamiento es algo doloroso y para recuperarme totalmente necesité 11 sesiones, el trato personal es inmejorable. Desde SportPlus, el fisioterapeuta, me realizó un seguimiento de mi lesión, me aconsejó ejercicios de rehabilitación y siempre me informaron del progreso de recuperación. Estoy muy satisfecho con el tratamiento.

¿Te consideras recuperado de tu lesión?

La recuperación total de mi lesión ha sido de casi 6 meses, al ser una lesión bastante grave. A día de hoy siento mi pierna como siempre, he vuelto a entrenar y jugar con normalidad, como antes de mi lesión.